Paternidad activa y responsable
Ser un buen padre va mucho más allá del viejo concepto de ser un buen proveedor de bienes materiales.
Especial convergente realizado para la clase de Taller de convergencia en medios (octavo semestre, 2020-2), con la profesora Claudia Patricia Bautista Arias.
Un análisis sobre las diferentes variantes de la comprensión que tenemos en esta parte del mundo sobre la paternidad. Culturalmente, la crianza y educación en los niños ha sido catalogada como una actividad a cargo de las mujeres. Además, a los hombres también se les asignan ciertos roles los cuales afectan el desarrollo de sus hijos y el bienestar de sus familias.
En la búsqueda de las características de un padre responsable, sobresalen concepciones machistas del rol masculino en la crianza, tradicionalmente, el padre estaba para el trabajo y para el descanso, dejando las tareas del hogar, las actividades con los hijos y el tiempo en familia en otro plano menos importante. Muchas son las consecuencias que sufre todo el núcleo familiar cuando esto ocurre y la diferencia es inmensa cuando se compara con una familia que ha tenido el privilegio de tener la presencia activa del padre de familia.
El mundo ha cambiado y con ello las relaciones afectivas que determinan nuestros destinos, por tal motivo se han distribuido mejor las cargas dentro de un número creciente de familias y muchos roles han cambiado con el paso del tiempo. Observen ustedes la diferencia que hace la presencia de un padre activo y consciente para las vidas de sus hijos en comparación con un hombre que no ejerce o ejerció la paternidad con responsabilidad: