Facultad de Comunicación Social - Periodismo

Henry Agudelo y el camino de la enseñanza

En nuestro programa “En Conexión con”, el fotoperiodista nos habló de su amor por la enseñanza y la fotografía, una pasión que nació desde el dibujo.

Entrevista realizada para la práctica profesional en Conexión Externado (noveno semestre, 2021-2), con la profesora Mónica Parada Llanes.

En un principio, Henry Agudelo no deseaba ser fotógrafo, su pasión era el dibujo, un arte que había perfeccionado en sus años de colegio. Fue en 1979, cuando comenzó a trabajar para el diario El Mundo, que la fotografía llegó a su vida: “empecé a revelarles el trabajo, a ver ese mundo tan mágico de la fotografía. Ver cómo en una cubeta se revelaban esas imágenes, eso a mí me parecía magia y me fui enamorando y encantando”. Así iniciaría un camino lleno de reconocimientos.

Este fotógrafo, oriundo de Medellín, resalta por sus fotografías únicas. Es alguien que deja su sello personal en cada momento que retrata, desde un evento deportivo hasta el conflicto armado, una versatilidad que según él solo tienen quienes nacieron en esta tierra colombiana; sin embargo, fue algo que tuvo que aprender por su cuenta: “no había un instructor, alguien que nos guiara, nos fuera orientando y diciendo “esto es lo que hay que lograr”. Entonces lo fuimos aprendiendo empíricamente, por eso yo siempre he dicho que la universidad mía ha sido la calle, me lo ha dado todo, esa visión del mundo”.

Se describe a sí mismo como una persona obsesiva, que siempre busca aprender y mejorar su trabajo, esto hizo que sus fotografías fueran reconocidas en todo el mundo. “Fui ganando concursos nacionales e internacionales. Eso me fue marcando más mi parte emocional, porque esos premios me iban diciendo “vas por buen camino””.

Contrario a lo que se creería, su trabajo ha tenido más reconocimiento en el exterior que en Colombia “Aquí existen muchos celos. Un profesor siempre me decía: “quiere tener muchos enemigos, gánese el primer premio””.

A medida que iba creciendo su trabajo fotográfico se encontró con que sus compañeros no tenían el deseo de enseñanza que para él era fundamental, pues llevaban tanto tiempo en la fotografía que no les gustaba compartir el trabajo. Eso fue lo que le pasó con su llegada a Bogotá para trabajar con el periódico El Tiempo. Henry estaba lleno de expectativas de poder aprender de grandes fotógrafos de la época como Nereo López, Leo Matiz y Jorge Parga, pero se encontró con un mundo muy cerrado, oculto, no querían que él aprendiera un poquito de lo que ellos sabían, recuerda. Lo que lo llevó a pensar que el camino es enseñar. Desilusionado llegó a su casa o contarle a su esposa e hijos, sintiendo que esas personas habían frustrado su sueño, pero hace seis años sus hijos le dieron una gran sorpresa, fundaron el Instituto Henry Agudelo y le dijeron a su padre “aquí vas a depositar todos tus sueños”.

Desde ese momento Henry se ha dedicado a sus dos pasiones: la fotografía y la enseñanza, instruir a nuevas generaciones de periodistas colombianos en este arte y orientarlos para que encuentren su propia huella detrás del lente. “Tengo referentes, pero no me quiero quedar con esos referentes, yo quiero ser algo diferente. Eso es lo que trato de enseñar a mis estudiantes: podrás hacer contenido, pero tú sello personal va aquí (señala su corazón), es interno y no te lo puede quitar absolutamente nadie, así que hay que trabajarlo”.

Agudelo dejó una última reflexión ante un oficio que cada vez se ve más permeado por la inmediatez del mundo digital: hay que preguntarse constantemente cuál es tu nuevo reto.

Vea la entrevista completa a continuación:


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