Facultad de Comunicación Social - Periodismo

“Soy un tipo muy visceral y muy emocional”, Alejandro Marín

Entrevista por Daniela Correa Grisales para la clase Introducción al Lenguaje Periodístico, con la profesora Mónica Parada Llanes.

Cautiva a sus oyentes con su hechizante voz, su intrigante y leve acento paisa, con interesantes análisis de música y con una especial conexión que crea con su audiencia cada vez que está al aire. Estoy hablando de Alejandro Marín, el hombre que más allá de ser el director de la emisora La X (103.9) tiene una larga historia y experiencia, gracias a una intensa carrera que empezó desde muy niño y que lo ha llevado por caminos que ni él se imaginó recorrer.

Alejandro, quien me atendió en las instalaciones de Todelar luego de estar al aire en el programa ‘Mañanas X’, me dejó muy claro que como periodista entiende perfectamente la magnitud de su labor en radio y cómo funcionan los medios de comunicación.

La entrevista se desarrolló en una cabina de La X. Esperé pacientemente, y cuando los nervios estaban quizá en su máximo nivel, me saludó. Estaba relajado pero muy atento a cada pregunta que le hacía, me miraba a los ojos y cuando me quitaba la mirada se concentraba tanto en sus respuestas que olvidaba volver a hacer contacto visual. Intentaba acomodarse en la silla y cambiaba de posición constantemente.

“Fue un momento inolvidable”. Así recuerda Alejandro Marín la primera vez que estuvo al aire en radio, en la Emisora Veracruz Estéreo (101.7 FM) en Manizales, cuando tenía tan solo 11 años.

Recuerda absolutamente todos los detalles de cómo empezó su interés en este medio, que 30 años después sería su mayor pasión y lo convertiría en una figura pública y en uno de los periodistas culturales y analistas musicales más respetados del país.

Él, quien solo había estado un par de ocasiones en radio, la primera contestando una pregunta en un concurso de la emisora ‘Ondas Del Nevado’ en Manizales para ganarse el libro “El buscador de tesoros”; y luego, recitando un poema para un programa de media noche de Marco Aurelio Álvarez, un importante locutor y compositor de música colombiana en Manizales; recuerda con un poco de nostalgia ese momento, y me confiesa: “yo nunca voy a dejar de sentirme emocionado y nervioso al hacer radio, nunca voy a dejar de preocuparme por lo que sale al aire y lo que piensa la gente”.

En la búsqueda de la emisora musical que siempre quiso dirigir, ha tenido la oportunidad de trabajar en emisoras como ‘Radiónica’, ‘La W’ en 2007 y 2008, en televisión en Mucha City de 2009 a 2010; y ha trabajado con importantes figuras del periodismo colombiano como Néstor Morales y Julio Sánchez Cristo haciendo grandes cubrimientos y entrevistas. Pero Alejandro también tuvo que alejarse un poco del medio trabajando como profesor de inglés y traduciendo discursos y sermones para otras personas.

Ahora que conduce ‘Mañanas X’, programa de 6 a 10 de la mañana, cree que la mayor enseñanza es la responsabilidad a través de la opinión.  Para Marín es importante entender qué tan influyente es su opinión y si esta impacta positiva o negativamente, especialmente en la tan polarizada sociedad colombiana. Cree que es primordial en el periodismo, darle al oyente el beneficio de la duda y la oportunidad de escoger por sí mismo en medio de las opciones que el mismo periodista brinde, algo muy difícil en una era en la que todo el mundo opina y todos parecen ser importantes.

“Mi mayor fortaleza siempre va a ser mi mayor debilidad”
Una de las herramientas más importantes en radio, para él, es la simpleza, es ser directo, sencillo y concreto, este último es uno de los aspectos que más se le dificultan a Alejandro, pero dice que está trabajando para mejorarlo. Aunque sabe que es muy bueno hablando, dice también poder ser muy malo. “Cuando me entiendes hablo muy bonito, pero cuando hablo mal el mensaje se vuelve ruido, puedo ser muy técnico o científico en el análisis musical y sonar arrogante y presumido, o simplemente incomprensible”.

Profesionalmente es un periodista que se arrepiente de muchas cosas, soy un tipo muy visceral y muy emocional”, dice. Ha sido irresponsable con su opinión al aire y en redes sociales, pero también está seguro de que eso se corrige con el recorrido y la experiencia, y aunque a veces quisiera devolver el tiempo, de esos mismos errores ha aprendido mucho. Su carrera ha sido como una montaña rusa, no ha habido un segundo que no haya tenido que sacrificar algo, desde tiempo con la familia, amigos, hasta incluso dinero.

Marín acepta y asume con responsabilidad ser reconocido como uno de los periodistas culturales y analistas musicales más respetados en el país, “se siente bien y cada vez mejor. Aunque a veces es duro, se aprende a lidiar con el hecho de ser una personalidad que guía a otros” en el camino del periodismo.

El éxito de La X (103.9), la única emisora en Colombia de propuesta diferente con los mejores éxitos del momento en inglés, radica en que Alejandro tiene un equipo increíble. En su concepto, simplemente ha escogido a los mejores de la radio en el país y les ha dado la libertad necesaria para que hagan lo que mejor saben hacer: locutar un buen programa, colocar buena música y conectarse con los oyentes. Son un equipo innovador que apoya las ideas de Alejandro para así realizarlas 10 veces mejor de lo que él las planeó, son personas que nunca olvidan su audiencia y cómo funcionan las redes.

Más allá del análisis musical…
Hace algunos años, Alejandro no soportaba la música y decidió comprarse un equipo de sonido y aprovechaba a media noche, cuando no había ruido alguno, para escuchar su canción favorita. De esta manera revivía su amor por la música y le encontraba un nuevo sentido a las canciones. Aún lo hace. Le genera paz, tranquilidad, reflexión y quietud.

Alejandro ha logrado entrevistar a importantes figuras de la música como las  cantantes Natalie Cole, Norah Jones, el pianista Herbie Hacncok, el rockero John Forgerty, el compositor Lamont Dozier, Jack White, el artista Marilyn Manson y el grupo de hip hop The Black Eyes Peas. Pese a toda esta experiencia y la satisfacción que le ha traído entrevistar a tan grandes artistas, dice que le hubiera gustado entrevistar a Tom Petty, el cantante de rock que dejó un gran legado en la música y que falleció el 2 de octubre de 2017.

Frente a sus experiencias en vivo con la música, el concierto en Bogotá de la legendaria banda de rock U2, el 7 de octubre de 2017, ha sido el mejor concierto al que Alejandro ha asistido, es simplemente la banda de su vida. Fue un concierto dedicado especialmente para el país con los detalles que tenían preparados, como el uso de las pantallas con la bandera de Colombia y la paloma blanca y alusiones Gabriel García Márquez, el nobel de literatura.

U2 es una banda originaria de Irlanda, en 1976, década en la que a Alejando Marín le hubiera gustado vivir. Para él la década de los 70 fue una revolución en la música, simplemente se produjo todo y me explica de manera tan sencilla y a la vez tan experta, como si estuviera contando los números de uno a 10, que “se publicó el álbum Off the Wall de Michael Jackson, The Dark Side of the Moon de Pink Floyd, grandes éxitos de Eagles, Talking Heads, Ramones, el disco, el punk, el rock progresivo, todo, absolutamente todo”.

Curiosamente él se autodenomina como “un tipo muy visceral y emocional”, pero cuando le pregunto qué canción lo hace llorar y por qué, me responde que ninguna. Dice que aunque algunas canciones logran conmoverlo mucho, ninguna hasta las lágrimas, “hay momentos de la vida que me conmovieron mucho y están marcados con canciones, por ejemplo, en 2007 por una situación familiar”. Es decir, hay discos que recuerda con cariño y logran emocionarlo, pero no lo suficiente como para llorar.

Pero si hablamos del mejor momento de su vida, aunque “cada momento de la vida es un momento en sí mismo”, tiene que ser su visita a Estocolmo por haber conocido tanta gente y haber abierto su mente a tantas cosas. Esa visita está musicalizada con muchos sonidos como el del dúo de música electrónica Disclosure o el del cantante venezolano Danny Ocean en la famosa canción ‘Me Rehúso’.

‘Rabo de Nube’, del cantautor cubano Silvio Rodríguez, es la canción que marcó su infancia, pues fue su padre quien le enseñó a escuchar folclor cubano. Su infancia estuvo también marcada por el hip-hop, género que puede ser uno de sus favoritos pero como se denomina multigénero, por obligación y pasión, no tiene uno preferido. Sin embargo, señala que nunca logró una conexión con los géneros latinos o tropicales, “aunque no me mueven el alma, hay mucha belleza en ellos”.

 “La música me ha ayudado a curar la tristeza de otros”
Hoy más que nunca Alejandro está seguro de que la música es una fuerza de cohesión social, de formación de públicos y de construcción de seres humanos.

Hace 20 o 30 años la música definía quiénes éramos como personas, este analista musical sabe que la sociedad estaba dividida y separada por el tipo de  género musical que escuchara alguien y así mismo se definían las personas que no tenían la posibilidad de abrirse a otras opciones musicales sin ser juzgados. “Nos criamos en unas culturas muy segmentadas de la música y nos quedamos con prejuicios que alimentaron a los que tenemos ahora con respecto a nuestra sociedad, política y modo de vida”. Si eras metalero, eras solo metalero y no podías escuchar otro tipo de música.

Alejandro, quien ha hecho una serie de Podcasts de la Historia Secreta de la Música donde descifra mitos, leyendas y realidades de la misma, está 100% seguro que lo más lindo de la música debe ser su posibilidad de globalizar el sentimiento y unir al mundo, un cambio que se ha hecho con el pasar de todos los años a la par con procesos políticos, sociales y económicos.

Pero no es lo único. En lo personal, a Alejandro la música le ha ayudado a curar muchas cosas. Cree que es una cura y una enfermedad, y como Disc-jockey y analista musical completamente entregado a su trabajo y pensando siempre en su audiencia, la ha utilizado para ayudar a curar la tristeza de otros.

I got soul but I’m not a soldier”, dice el tatuaje de Alejandro Marín en su antebrazo, es parte de la canción All These Things That I’ve Done de The Killers, me lo muestra con orgullo y a la vez diciéndome que no se tatuaría otra frase. Buscó en vano otra del trio de raperos Migos, también relacionada con SOLDIER, pero desistió porque contradiría la de la famosa banda de rock.

“Para mí el vinilo es un fetiche”
Actualmente, Alejando emite su programa “Atrapados en vinilo”, los sábados de 6 a 8 de la noche en La X, un programa dedicado a la pasión por los discos, en el que explora la historia de la música y sus maravillas por medio de estos.

El gusto por los vinilos es por lo físico principalmente, hace este programa porque aparte de que están de moda, son un recurso visual excelente para las redes o “los socials” como él dice, su programa tiene una franja y horario especial con un formato muy bonito que es interesante y al final se vende bien.

“Aquí sí nos duele mucho la plata, el mal más grande que tiene el medio es para nosotros nuestra fortaleza y bien más grande”
La X es la emisora más comercial de Bogotá, y Marín se atrevería a decir que la más comercial de Colombia, es una estación radial que vive de la publicidad y la pauta que ofrecen a sus oyentes. Pese a esto se esfuerzan en equilibrar y mitigar el afán de comercializar y vender el contenido musical; tienen criterios muy estrictos a la hora de escoger a quiénes pautan y bajo qué condiciones.

Siempre pensando en la perspectiva musical, escogen anunciantes acorde a la naturaleza influenciadora de la emisora, para además protegerse como personalidades de radio, para ser auténticos con su audiencia. Están en contra de muchas condiciones de las empresas de publicidad como, por ejemplo, la ‘Pauta Orgánica’ que para los ojos de Marín es finalmente publicidad engañosa. Ocurre cuando alguien finge naturalidad al hacer algo, pero en realidad le están pagando y le está mintiendo a su audiencia.

Al equipo de La X 103.9 le parece interesante y retador el momento por el que pasan las agencias y el mercado de publicidad, y están abiertos a las posibilidades de este negocio en radio, pero como no dependen de portafolios económicos, como no venden gaseosas, como no tienen un importante empresario que los mantenga o ayude en momentos de crisis, deben ser muy selectivos con la publicidad que hacen y muy responsables al usar el poder de vender e influenciar a las personas.

Marín defiende su labor y la relación con la pauta: “aquí sí nos duele mucho la plata, el mal más grande que tiene el medio es para nosotros también nuestra fortaleza y bien más grande, es hacer plata para defender lo que nos gusta y para poder poner buena música… y más música”.

“No te quedes esperando a que Google te diga qué noticias vas a leer”
Definitivamente Alejandro Marín no necesitó haber estudiado una carrera formal y completa de periodismo para saber cómo funciona esta profesión.

En una emisión del programa ‘Mañanas X’, con respecto a los diferentes rumores publicados en Internet por la muerte del músico Tom Petty, Alejandro dejó planteada la siguiente pregunta: ¿está muerto el periodismo como lo conocemos o simplemente se está transformando?

En la entrevista la respondió y mandó un claro consejo a todos los periodistas en formación. Dice que el periodismo está transformándose, las redes lo han cambiado. Pero si algo está en verdadero peligro es la reportería. El ejercicio de buscar las noticias, hablar con las personas y estar en el lugar en que ocurren los hechos como base del periodismo es algo que debe protegerse desde cualquier género (crónica, entrevista, perfil, etc.).

Con mucha convicción, y siendo muy contundente, manifestó: haz la tarea de salir a la calle, de conocer a la gente, de hablar con ellos y de grabarlos, para poder registrar su lado de las cosas. No te quedes con lo que dicen en Twitter o en social media, busca tú las historias y repórtalas tú, en tu blog, en tu Facebook, en Twitter o donde quieras; solo así vas a lograr que el periodismo esté transformándose y no muriéndose”.

“Se necesita valor y coraje para coger la grabadora y ponerla en frente de alguien más”
Aunque ya mencioné el consejo que dio Alejandro Marín, él insiste en la importancia de la reportería y pese a que sabe que los teléfonos nos alienan y nos alejan aún más de las otras personas, reconoce su importancia al permitir dejar un registro para las futuras generaciones de lo que se hizo bien y mal en este mundo, para reconstruir historia y no cometer los mismos errores.

Su consejo es empezar a hacer reportería ya, no tenerle miedo a la grabadora, sin importar lo intimidante que esta pueda ser tanto para el entrevistador como para el entrevistado.

Si no hay un registro de lo que hablas con los demás, si no tienes cómo dejar escrito, tallado en piedra digital, lo que te pasó a ti como periodista desde que entras a la academia, va a ser muy difícil para generaciones futuras reconstruir eso y aprender de los errores.

Alejandro también es papá y la mejor enseñanza que puede dejarle a su hija es  “que tenga la capacidad de ver el mundo globalmente sin estar sujeta a ningún prejuicio, ni de raza, ni de religión, ni de sexualidad”. Igualmente, en la música, “que escuche lo que quiera, pero que respete todo tipo géneros y creencias de los demás”.

Este honesto y espontáneo hombre disfruta su trabajo como ningún otro, basta con ver sus publicaciones en las redes sociales, bailando mientras emite, o  escuchar sus elaborados programas. Es un melómano y un experto en análisis musical, alguien aterrizado en el periodismo.

Cumplió su sueño de dirigir una emisora musical. Ahora que dirige La X 103.9 – más música- no es cualquier emisora, es de las mejores del país. Es la mente creativa e innovadora detrás del éxito de este proyecto que empezó desde 2009 y que espera continuar por muchos años más.

Alejandro finalizó la entrevista expresando que no cambiaría su trabajo. “Me lo banco, como dirían los argentinos”.

Su libro: “Historia Secreta de la Música”
El pasado 1 de mayo de 2019, en la Feria del Libro de Bogotá, en el pabellón 21 en la sala D, con más 300 personas, la mayoría grandes seguidores del Music Pimp, Alejandro Marín presentó y lanzó al mercado su primer libro titulado “Historia Secreta de la Música”, igual que su serie de podcast. Era evidente la emoción de los asistentes, quienes prestaban mucha atención a las palabras del Pimp, mientras que afuera había una larga fila de personas esperando a tener la firma y conseguir una foto con él.

Fue posible establecer una relación entre Alejando, el moderador Jaime Andrés Monsalve y los asistentes por la forma en que se expresaba Marín y contaba sus anécdotas, de la forma más íntima posible, teniendo en cuenta el contexto en el que estaba, pero generando una conexión especial en un ambiente caracterizado por la pasión por la lectura, la música y la buena radio.

En este espacio habló, entre varios temas, sobre una de las motivaciones que lo llevaron a empezar a escribir, fue principalmente la pregunta de ¿qué tal si estamos equivocados? ¿Qué tal si todo lo que hemos escuchado hasta hoy nos lo han vendido? ¿Qué pasa si te das cuenta, como melómano, coleccionista, radiodifusor profesional, que muchas de las cosas están fabricadas?

“Así como intento demostrar estereotipos, a veces también caigo en ellos”, dice cuando se refiere al tema de las drogas en el libro y el capitulo Sexo, Drogas y Rock n’ Roll, y también al analizar la relación de estas con la música.

A la pregunta de cuándo y cómo supo que el libro debía tener esa narrativa testimonial y de exhaustiva investigación, respondió –con cierto aire de orgullo- que se lo debía a Juanita Escallón pues ella lo impulsó a sentarse a escribir, aunque el tono de contarlo en primera persona fue una decisión muy personal que ella respetó muchísimo y al final logro hilarlo todo junto con las historias y anécdotas que complementan cada capítulo del libro.

Alejandro Marín confiesa, con una leve risa, “no saber” de dónde sacó tiempo para realizar el libro, dice que fue un duro trabajo entre enero y febrero de 2018. Está seguro de que prefiere escribir en las mañanas o cerca de la media noche y madrugada, en total silencio, pues es la forma en la que se concentra más.

La charla terminó con el agradecimiento a sus padres, Margarita y José, Laura Marín, su compañera de blog, a DJ113, al diseñador y “a todos ustedes por ser oyentes tan fieles”.